Querido/a (inserte aquí su nombre):
Enhorabuena. Ahora puede ir salir a la calle y no
correr ningún tipo de peligro. Si se encuentra con alguna clase de
manifestación, de esas que organizan los perroflautas,
puede estar tranquilo. Ahora, los que osan protestar se lo pensarán dos veces
antes de recorrer una calle gritando consignas y sosteniendo pancartas
ridículas. Eso sí, que a nadie se le ocurra grabar la intervención policial que
ello origine, ya que de lo contrario, puede ir usted desembolsando una pizquilla sin importancia,
30.000€ de nada. Y es que, en nuestro sistema democrático, todo el mundo puede
manifestarse. Pero eso sí, mejor cada uno en su casa y sin hacer demasiado
ruido. Así nos ahorramos absurdos reportajes televisivos, críticas, pruebas de diversa índole o cualquier otro instrumento social que ponga en duda este sistema. Insisto, no se preocupe.
Siempre quedará algún periodista incómodo, de esos que les gusta tocar las
narices en las tertulias, informar con "demasiada" veracidad o atreverse incluso a cuestionar nuestra indiscutible gestión, pero ya hemos mostrado nuestra disconformidad con ello y pronto será apartado,
trabaje en medios públicos o de propiedad privada. Desde este momento puede
sentirse verdaderamente orgulloso de su país, ningún personajillo incómodo
volverá a contrarrestar nuestros argumentos, ni siquiera por Twitter, faltaría más.
Pero no se olvide, que aún queda trabajo por hacer.
Debemos convencer a todo el que se deje, que confirmarnos en el poder en las
próximas elecciones, (a nosotros y/o a algunos de nuestros primos) no es una
opción tan mala como esos perroflautas
quieren hacernos creer. Al fin y al cabo, ya ha empezado la recuperación, y
habrá gente que incluso se podrá volver a permitir comprar a sus hijos todos
los libros de texto, con un sustancioso sueldo, en el muy mejor de los casos,
de unos 1000 euros. ¿De qué se quejan entonces? Son unos auténticos
desagradecidos. ¡Con lo que hemos
luchado por mantener estable la prima de riesgo y tener tranquilos a los mercados! Ellos sí que saben
reconocer nuestro trabajo. En fin, que le voy a contar a usted que no sepa.
Nuestro deber es luchar contra viento y marea para preservar la patria. Mucho
fútbol, mucho programa del corazón, y nada de leer libros ni tonterías
perroflauteras. Así, saldremos de ésta. No lo dude.
Un saludo.
El poder.
Pablo Torres Yébenes
05/04/2015